Durante el período estival, el sistema de refrigeración evaporativa (pulverizaciones de agua) existente en las salas de floración de setas se muestra insuficiente ante las altas temperaturaspara mantener un ambiente otoñal , lo cual provoca unas pérdidas de producción de setas de 1,5 Ton/año.

No pueden utilizarse aires acondicionados para esta refrigeración, porque en las salas no han de haber corrientes de aire que desecan el micelio, y la alta humedad relativa (próxima al 90 %) hace enormemente ineficiente energéticamente este sistema.

Como alternativa se instaló una trama de tubos capilares flexibles de polietileno de pequeño diámetro suspendida en el techo por la que pasa agua fría. Al contactar con ellos, el aire se enfría y, como pesa más que el caliente, se genera una corriente que produce un efecto de enfriamiento.